Las vacaciones se acaban (para los menos afortunados, que somos la mayoría), pero no el verano. El calor inusual que aún nos trae septiembre nos permite usar bermudas en los momentos más relajados, pero es inevitable que la paleta de colores vaya mudando a los tonos del otoño. Quizá sea algo subconsciente o una rutina estacional propia que he ido adoptando con el tiempo, pero cuando mediados de agosto llama a la puerta, los tonos ácidos y saturados comienzan a diluirse en mi armario y desdibujan lo que en su momento fueron veraniegos estampados.
Este año, la fecha señalada me pilló durante las vacaciones en Marbella, algo que no permitió que esta manía inconsciente que me prepara progresivamente para la vuelta al cole se tomara un descanso.
Polo : C&A; Pantalones / Shorts: Bershka; Zapatillas / Slip on plimsolls: Fossy; Gafas / Shades: Barai Sunglasses; Reloj / Watch: Mr. Boho
Take care,
Javo