Hace un año me lancé a la aventura que supone imaginar cómo sería la vida sin vello durante el periodo de tiempo que dura un tratamiento de depilación láser. Tras la buena experiencia que había tenido (ya no imagino la vida sin vello, ¡pues no tengo!), contactaron conmigo desde Dermasana, una escuela superior de depilación láser de Madrid. Ya conocía la técnica y habían finalizado mis sesiones, pero tenía una zona del cuerpo afiliada a Andina de por vida (o eso yo creía), que me hizo probar el tratamiento en los brazos.
Este centro se caracteriza por ser la primera escuela especializada en formación de auxiliares láser y son ellas mismas (las alumnas) las que realizan las sesiones (a modo de prácticas) con la supervisión de uno de los profesores. Los competitivos precios de la clínica son la primera ventaja que te llama la atención de Dermasana. Las tarifas por sesión van desde los 8 € las axilas hasta 50 € piernas completas, precios que no van asociados la compra de bonos ni packs y que permiten probar el servicio sin necesidad de compromiso en el tiempo.
Al inicio de cada proceso, el médico de la clínica valora tu piel indicándote qué láser es más apropiado (yo me hago Diodo) y el número de sesiones a realizar viene determinado por cómo responde tu piel a lo largo del tiempo.
Yo ya probé mi primera sesión hace un mes y apenas me ha salido vello nuevo.
Yo ya probé mi primera sesión hace un mes y apenas me ha salido vello nuevo.
Dermasana se encuentra en la C/Alcalá, 180, en Madrid. Para más info, podéis visitar su blog.
Felices fiestas,
SiL